Al igual que la rinitis alérgica, el asma alérgica es una enfermedad que se desencadena por la exposición a determinados alérgenos, como el polen de las gramíneas, el polen de los árboles o los ácaros del polvo.
Mientras que la rinitis alérgica causa inflamación e irritación de los ojos, la nariz y las vías respiratorias altas, el asma alérgica afecta principalmente a las vías respiratorias bajas. Algunos de los síntomas del asma alérgica son sibilancia, opresión en el pecho, disnea y tos persistente.
El desarrollo de asma es más probable entre personas alérgicas
Los estudios demuestran que la rinitis alérgica y el asma alérgica están intimamente relacionadas y casi la mitad de las personas con alergia respiratoria padecen ambas enfermedades. En efecto, muchas personas con rinitis alérgica también desarrollan asma alérgica.
Los estudios demuestran que la rinitis alérgica y el asma alérgica están intimamente relacionadas y casi la mitad de las personas con alergia respiratoria padecen ambas enfermedades. En efecto, muchas personas con rinitis alérgica también desarrollan asma alérgica.
Tratamiento conjunto de la rinitis y el asma alérgicas
Cada vez más estudios indican que la rinitis alérgica y el asma alérgica no son dos enfermedades separadas sino que son manifestación de una misma enfermedad y que su tratamiento puede ser beneficioso para ambas enfermedades.